Un error común que se comete al definir los Objetivos Educacionales es el de redactar nuestros enunciados en base a las competencias de nuestro egresado pero olvidándonos del contexto de la profesión y las características de estas competencias en el campo laboral. Al hacerlo así, terminamos repitiendo los mismos enunciados de las Competencias (Outcomes) en los enunciados de los Objetivos.
Nuestro primer error es tener enunciados deficientes, confusos y demasiado generales para nuestros Objetivos Educacionales.
En las visitas de evaluación, una falla muy notoria se da en la entrevista a los profesores y sucede cuando ellos no han entendido realmente el significado de los Objetivos Educacionales, a la hora de responder preguntas sobre este tema, intentan definir los Objetivos Educacionales en términos de los Resultados del Aprendizaje confundiéndolos en su respuesta.
A ellos hay que recordarles permanentemente que los Objetivos Educacionales son nuestra meta, las características de nuestro egresado ideal y que es con el desarrollo de las Competencias en los alumnos, que llegaremos a ellos.
Es por eso que es importante la divulgación por todos los medios posibles de los Objetivos Educacionales y de las Competencias, para que todos los involucrados en el proceso no sólo sepan de qué tratan sino también para que opinen y aporten en su enunciado y en su modificación si esto fuera necesario.
